viernes, 2 de mayo de 2008

Mi vida se consume... Se consume...

Y yo mientras me ahogo,
y yo, mientras, sigo escuchando el tic-tac infernal que me recuerda que todavía no he logrado resucitar.
Y todavía no he prendido la mecha.
Excusas.
Excusas.
Todavía no he logrado encontrar la manera de encender este mechero tan extraño.


Mi vida se consume.
Y sigo escuchando el sonido de las teclas del ordenador que son golpeadas por las yemas de mis dedos. Sigo viéndome aquí sentado, frente a la pantalla. Sigo mirando a mi alrededor y veo lo mismo que vi ayer. Y lo mismo que veré mañana.

Tic-tac
tic-tac
tic-tac
tic-tac
...